Posada Campo

Un lugar encantador. La casa es preciosa y las habitaciones muy acogedoras y limpias. Ubicada en un barrio muy tranquilo de Suances en la parte alta. Hemos estado 5 días y la verdad es que repetiremos. Por poner una pega las habitaciones del último piso tienen velux y una ventanita baja por lo que a veces me resultaba un poco agobiante pero el sitio es idílico.

Posada estupenda,limpieza excelente, tranquilidad absoluta, cama confortable y cómoda Jardín cuidado y bonito con una agradable zona de silllones. A destacar una estancia con mesas y todo tipo de utensilios a disposición de los huéspedes para desyunar , comer o cenar lo que lleves de fuera.incluso dispone de cafetera con cápsulas de distintas variedades de café, sobaos y galletas para tomar un tentempié a. cualquier hora del dia. Situada en el pueblo cerca de bares y restaurantes y al lado de impresionantes miradores. Se puede bajar a la playa dando un paseo disfrutando de impresionantes vistas. Muchisimas gracias a Merche por su amabilidad y el gran detallado que tubo con nosotros. No lo esperabamás en absoluto. Nos sorprendió su generosidad. Es de valorar de forma muy positiva en estos tiempos que corren. Excelente anfitriona.Paula muy amable nos aconsejó sobre donde comer. Un acierto. Sin duda , recomiendo este alojamiento.

Recibidos con indicaciones amables antes de llegar , La habitación muy bonita , las vistas igualmente . Una casa de la familia , donde te sientes parte de ella por la cercanía , charlando con el nieto del abuelo , que habitaba antes el caserón . No sirven desayuno , pero por gentileza hay maquina de café , nevera , microondas y alguna galleta y fruta . Para repetir y aconsejar

Estuvimos 2 días. Es una posada tranquila, situada en el único barrio pesquero que queda y muy cerca del centro de Suances, aunque esta en las afueras. Posada muy limpia y bien atendida, con espacios para descansar. Las vistas increíbles. La atención personal de Roberto, inmejorable. La atención telefónica de Merche, también. Te aconsejan donde puedes ir, donde puedes comer y que visitar, que no se conozca mucho, para conocer parte de Cantabria. Sin duda, para repetir. Muy aconsejable

Volvimos y cada vez mejor.. Tan familiar y tan limpio.. Nos tocó la habitación del ático. Con lo cual las vistas geniales Ni un ruido la cama comodisima.. Tienes un porche para tomarte un café buenísimo y disfrutar del jardín súper cuidado..

Hemos estado como en casa. Las chicas muy profesionales, cercanas y simpáticas.